sábado, 28 de enero de 2012

Hero Core: en honor a la nostalgia y a lo clásico ¡FREEWARE!

Lo prometido es deuda y vuelvo de los exámenes con un artículo completo para todos vosotros…

Al grano
En Hero Core, encarnamos a Flip Hero, el héroe que vuelve (ya que estamos ante una séquela) para la batalla final contra Cruiser Tetron, un malvado señor de la guerra robot que se propone conquistar la galaxia desde su maléfica guardia en un asteroide. Y Ya está. No hay mas, tu eres el héroe y hay un malo malísimo, ni diálogos, ni otros personajes, esto es a la vieja usanza, estas aquí para abrirte paso a través de las terribles hordas de bestias y maquinas que Tetron ha creado, llegar al Core y destruir a tu némesis, salvar el mundo y volver a casa. Si alguno os acordáis de algún juego que con un par de pantallas en la intro y en su final se ventilara toda la línea argumental pues esto es lo que encontrareis en Hero Core.  ¿Solución fácil? Quizá, pero la verdad no le he echado de menos la historia.

breve resumen de la historia en una imagen

Tan retro que es reretro
El entorno gráfico de Hero Core nos sumerge en la simplicidad de las viejas glorias de la industria del videojuego. Emulando las sensaciones provocadas ya no por la SNES o la Megadrive, porque Hero Core va algo más lejos, concretamente estamos ante un juego que bien podría ser para la añeja Atari2600 o la Commodore64. Diseños simples y mucho pixel, todo sobre blanco y negro puros (en plan paleta de 128 colores), pero con unas animaciones y efectos un tanto más dinámicas y con más detalle, que le dan el toque que nos vuelve a la realidad y nos hace saber que es un juego del 2011. Brother Android se encarga del resto para asegurar-se que este viaje en delorean tiene todo lo que le falta poniéndole música y efectos de sonido al más puro 8-bit. En resumen unos gráficos y ambientación con encanto, que dan un paso más (hacia atrás) en eso de dar-le el toque retro a los juegos, que por otro lado es algo ya habitual en el indie. Me ha gustado bastante todo este toque, aunque para ser sincero soy demasiado joven para haber jugado a cualquier juego de la Atari2600 y disfrutar del intencional toque nostálgico que le han querido dar.

me siento muy retro

A veces soy muy pureta
Ahora viene lo bueno, la jugabilidad de Hero Core se encuentra bajo la filosofía del fácil de aprender, difícil de dominar. Controles simples, dinámica simple, pero con base solida y fiel a los clásicos, tan fiel que me hace recordar que a veces no hace falta tanta tontería para hacer que uno disfrute con un juego.

Por un lado se trata de un shooter puro, nos abrimos paso sala a sala, esquivando y acabando con los enemigos. Y para tan violenta tarea de exterminio contamos, no solo con nuestro blaster, sino con una espada capaz de bloquear disparos y un ataque ultimátum de esos tan xulos que te dejan gustirrin al usar-lo (ah si y volamos en jet pack aunque no se note). Siguiendo con la dinámica de combate hay que destacar que los enemigos son muy variados (habrá como unos 23 sin contar bosses) y nos atacaran con diferentes patrones de disparo. Básicamente la combinación de ellos en ciertas cantidades en una sala es lo que crea el reto. Los hay para todos los gustos de fáciles, duros, grandes, gigantes, molestos, muy cabrones y otros que no conformándose con ser cabrones cambiaran su ataque y movimiento a medida que les baja la vida. No me gustaría olvidarme de destacar también los pequeños pero deliciosos detalles que aportan riqueza al combate. Por ejemplo, los golpes de espada dañan mucho más que el blaster, pero claro al tratar-se dé una arma meele tendremos que acercar-nos mucho al enemigo, así como hay trozos donde para disparar en las dos direcciones posibles tendremos que alternar la dirección rápidamente, a la vez los diseños de los niveles nos dificultaran el combate a su manera (pozos de lava, lasers…) o que nos puede aparecer un “cazador” (aka bicho muy xungo) en cualquier momento.

piu piu piu!

El otro punto fuerte es que no se basa en un avance lineal. Tendremos que explorar la laberíntica guarida de Tetron, al más puro estilo metroid. Avanzando de forma libre por las diferentes salas, descubriendo objetos y atacando núcleos de energía podremos abrir-nos paso a nuevas zonas en un diseño de mapeado un tanto puzle. Salvo algunas zonas, siempre podremos ir hacia donde queramos y hacer el orden de bosses que nos dé la gana (por cierto son más de 10). De hecho es tanta la libertad que si lo deseas y te sientes con capacidades puedes enfrentar-te al boss final prácticamente al principio de la partida (ya que realmente lo puedes ganar, o eso dice la leyenda). La forma típica de jugar, pero, es explorar la base, con la ayuda de nuestro mapa (que por cierto lo puedes quitar en las opciones y jugar dibujándote el tuyo en un papel igual que hiciste quizá en los retro-juegos de antaño que no solían tener estas cosas modernas de los mapas), coger las mejoras del traje, el blaster, la espada y la vida, así como unos ordenadores que nos darán información y nos facilitaran un poco la aventura.

En resumen
El resultado final es un juego de porte clásico, hasta puede recordar-nos a un juego de naves si le quitas el desarrollo lineal de niveles. Y es que creo que el gran merito de Hero Core no es otro que el de reproducir con unos tenues giros modernos, un esquema clásico que a veces creo que ya ha quedado un poco olvidado y que aun es capaz de divertirnos. Evidentemente me gusta la innovación como al que mas (y decir lo contrario teniendo un blog de juegos indie sería absurdo), pero a veces a uno le viene de gusto jugar a la vieja usanza, uno desea de reencontrar-se con la esencia del juego, la simplicidad y la sencillez. No esperéis pues un nuevo concepto, sino más bien una solida combinación de exploración y acción capaz de divertir a todos y fiel a las raíces más arcades. Si eso es lo que buscáis, Hero Core puede ser vuestro juego.

Lo Malo
Su duración es “relativamente corta”, podéis encontrar corto el juego general (yo lo pongo en longitud media), pero hay que admitir que tiene diferentes modos de dificultad y que al jugarlo en modo difícil el mapa entero y la disposición de los monstruos cambiara por completo. Así que es 100% rejugable. A la vez si os seduce realmente el juego hay un modo infinito, que va generando “pisos” de forma aleatoria. Pero admito que no es lo mismo jugar dos veces el juego en dificultad distinta por muchos cambios que pueda haber, que jugar una aventura principal de larga duración. A pesar de esto la verdad es que es un juego al que no le tengo demasiado que criticar, al fin y al cabo creo que Hero Core no se pasa de ambicioso y eso hace que camine siempre sobre seguro y sin cometer errores fatales. Además ya deberíais saber que estos juegos de exploración libre me seducen de mala manera.

¿Quién y cómo?
Daniel Remar (Remar Games) ya lleva unos años como developer (lo pongo en ingrish que mola mas) y su juego más ambicioso y reconocido es Iji (un plataformas de los que hace que se te caiga la baba), todos sus trabajos son freeware y lo curioso es que a pesar de su éxito en el campo videojueguil (tanto Hero Core, como Iji, como Hyper Princess Pitch han tenido relativo éxito y/o han estado en tops de reconocidas webs y ganado premios) sigue con su filosofía de que el desarrolla juegos como hobby. Si Hero Core no os convence vale la pena echarle el ojo a sus otras creaciones que ya son unas cuantas.



Descarga el juego completo: http://www.remar.se/daniel/herocore.php



viernes, 20 de enero de 2012

Postear en tiempos revueltos

No, amigos, no he cerrado el blog, ni me lo han cerrado, aun (esas declaraciones que hice en el artículo del Limbo me saldrán caras alguna día).

Sencillamente se trata de los exámenes y bueno para ser sincero que he estado muy liado (voluntariamente) con un “”””proyecto”””” relacionado con otras aficiones al que le he dado más prioridad que al blog. No diré de que se trata porque sé que os gusta que sea misterioso.  Solo decir que calculo que dentro de una semana, a menos que no me inspire en un descanso entre estudio y estudio, volveré y os traeré una autentica joya de juego, que me ha encantado.