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domingo, 1 de abril de 2012

El Retroide ESPECIAL ¡Colaboración!: Mother 3, Directo al Corazón


Este es nuestro tributo a la gran saga de RPGs, hoy cerramos el circulo con su tercer y último juego. Y tampoco me ha correspondido a mí hablar del Mother 3, sino que lo ha hecho nada más y nada menos que El Pepinillo Guerrero. Sergio el hombre tras el pepinillo lleva un genial y ya veterano blog de videojuegos, del que sin duda no puedo evitar destacar su estilo al escribir todas sus reviews y artículos varios de opinion. No siempre libres de polémica, provocadoras y terriblemente ciertas, aunque nos duelan, las escribe con autentica gracia, talento y un toque de cinismo mostrándonos que detrás de sus palabras hay una autentica experiencia y pasión en lo que respeta a esta noble afición que compartimos hacia los videojuegos.

Siendo una de las primeras personas con las que me cruce en este mundo del blog, fue una gran sorpresa cuando acepto reescribir sobre el juego y es para mí un placer dejaros hoy, en sus manos.

Directo al corazón



Dentro del recopilatorio EarthBound de El Undroide, falta comentar un último juego. Eso sí, no estamos hablando de un juego convencional ni mucho menos sino de una auténtica obra maestra de los videojuegos: la tercera y última entrega de la serie. MOTHER 3 es uno de los juegos más tristemente olvidados por parte de Nintendo. Su desarrollo comenzó en 1996 para Nintendo 64, llegando a conseguir una demo parcial y algún tráiler del juego, pero nada más lejos de la realidad, el juego estaba muy verde para su creador y acabó trasladando su proyecto hacia otras plataformas. Finalmente Game Boy Advance lo albergaría, 10 años de desarrollo para que al final en 2006 saliera a la venta, solo en Japón. No se olió por occidente, algunos no lo querían ver ni en pintura. Y a pesar de ello, es uno de los juegos más emblemáticos que ha pisado una portátil. Enormes los fans de Starmen, lograron traducirlo al inglés con una localización soberbia, y el año pasado fue el turno de la traducción española, igual de conseguida. Cada uno que lo haga como quiera y con los medios que disponga, pero nadie debería perderse una inmensa joya como es el título del que vengo a hablar.
Con los artículos de Undroid y Guifo ya os podéis hacer una idea de cómo era la idea MOTHER dentro del RPG: una parodia, una reconstrucción y burda comedia del juego de rol habitual, enfatizada en sus irreverentes y divertidísimos diálogos, su forma de romper clichés y ridiculizar cualquier tópico, y también los guiños que ejercía a otras conocidas series. Ríete de guerreros en mundos imaginarios cuando manejas a unos críos con poderes paranormales que la gente considera normales en un mundo actual, con su sociedad, policías, bomberos y demás; y ríete más cuando tenías que luchar contra pulgas, señales de tráfico, puertas, hippies new-age y demás.



MOTHER 3 coge todo ese aroma de EarthBound pero se va por otros derroteros y lo plantea de una forma mucho más distinta a las otras dos entregas. Manejaremos a Lucas, un chico tímido y cobarde dentro de una cariñosa familia en las Islas Nowhere, que forman el mundo del juego, más concretamente en el pueblo de Tamizly, donde se vive de forma tranquila y apacible sin prisas ni sufrimiento, ciertamente inspirado en el mundo ideal anarquista que muchos sueñan. Lucas, junto con su hermano gemelo Claus y sus padres Flint y Hinawa, vive en la paz completa. Pero al pueblo llegará de la nada un ejército vestido de cerdos: los Puercaretos. Estos son lo opuesto: quieren dominar el pueblo a base de un sistema estamental, introduciendo el dinero a la gente y acercándoles la electricidad, la tecnología, el espectáculo, etc. Esto provocará disputas en el pueblo, tanto políticas, filosóficas como existenciales, tanto que éste irá evolucionando hacia una sociedad autoritaria donde todo el mundo es “feliz”. 

Lucas, marcado por unos sucesos iniciales muy especiales, reniega de esta sociedad y comienza una búsqueda… una búsqueda por la felicidad.


La historia brilla en todo su esplendor y nos trae un planteamiento único sin par en todo el mundo de los videojuegos. Por una parte, tenemos los mismas paridas non-topic de EarthBound, el mismo humor irreverente y directo del juego. Cada personaje tiene su forma de pensar, son únicos e inimitables, algunos delirantes y cómicos, manteniendo el ritmo de juego alto y sin provocar tedio. Es la suma de una gran experiencia. Pero, por el otro lado, la historia no es algo alegre. Lleva tintes trágicos y muchos diálogos denostaran los problemas de una sociedad que ya no es lo que era, que permanece en constante evolución y que deja sus raíces para abrirse a un mundo de placer y “felicidad”. Lo natural contra lo artificial en todo su esplendor, en una historia en la que se añade como elemento fundamental la familia. Lucas y su familia serán el mejor ejemplo de todo eso que cambia, de todo un mundo que ha cambiado.

MOTHER 3 se va elaborando a base de conflictos sociales, pero nunca los plantea de forma inmediata, sino desde una tercera persona ajena y cambiante. Efectivamente, el punto de vista irá cambiando y no siempre manejaremos a Lucas en todo el juego. De hecho, en los 3 primeros capítulos llevaremos a otros personajes del simpar argumento: Flint, el querido padre y guarda del pueblo, el ladronzuelo Duster que sin embargo es incapaz de odiar a la gente, o un mono muy mono con unas mejillas muy monas y una correa de seguridad en el cuello. También destaca la princesita Kumatora y nuestro querido mejor amigo del hombre, Boney. Al manejar a varios personajes podemos adquirir diferentes perspectivas de la historia y del gran planteamiento inicial, que empezará a desarrollarse con más fuerza en el capítulo 4, cuando ya manejaremos a Lucas. El juego explota su potencial en este punto y lo exprime al máximo, va elevando las causas y consecuencias cada vez más alto para que llegado al final, reviente en uno de los finales más bonitos vistos en un videojuego, simplemente espectacular. Algo puramente emotivo que lo engloba todo y que lo concluye de forma magistral.


Pero esto es un juego, es más, es un RPG, así que hay que hacerlo ameno y entretenido. Incluido a nivel jugable donde apenas presenta cambios respecto sus predecesores, pero es lo suficientemente entretenido para enganchar al jugador. Combates por turnos de toda la vida, magia, objetos, alguna que otra habilidad especial, subidas de nivel de toda la vida, etc. Cada personaje con sus PV, PM, Ataque, Defensa, etc., con sus armas y equipo y con su nivel. El grupo principal constará de 4 personajes, cada uno de ellos muy particulares y con sus propias habilidades, algunas más útiles que otras. La marca MOTHER nos llevará a luchar contra arañas, coches, animales mutantes como leones-gallos o elefanteavestruces, guitarras de rock, el arte, cucarachas, Puercaretos y demás, cada uno con sus particulares e identitarias acciones inverosímiles: que si te dan un martillazo, que si se esconden detrás de otro, que si cargan baterías, que si te mira disimuladamente, que si propaga la paz y amor por el mundo, etc.

Los combates no son aleatorios sino que, al igual que en EarthBound, cuando te acercabas a un enemigo entablarías combate con él, y dependiendo de tu posición lo harías con un turno extra o con un ataque rápido del enemigo. Sí hay un par de puntos distintivos: primero tenemos un marcador de PV estilo tragaperras, que irá bajando y bajando tus PV de forma paulatina pero no directa, es decir, si recibes 100 de daño, tus PV irán bajando pero mientras tú sigues con el combate, y si lo finalizas rápido, puedes haber recibido 40PV en daño en vez de la totalidad. En algunos casos pueden salvarte la papeleta en los combates más duros. El otro punto llamativo es la capacidad de golpear al enemigo al son del tempo de la música. Como hay una barbaridad de melodías de combate, no siempre hay que seguir los mismos patrones, además, a muchas melodías les da por numerosos cambios de ritmo o por intervalos que, en otras ocasiones no sonaban, cambiando el ritmo y la pulsación. Es difícil y un poco lioso, pero es un añadido entretenido y ameno para el jugador, en absoluto necesario para completar el juego.


Y estás son las características del sistema de juego, poco más. Esto no es Dragon Quest, aquí no se centra en el juego sino en la historia, pero es importante no despreciar el sistema de juego y hacerlo estable y es algo que MOTHER 3 cumple. No se requiere de frustración para avanzar en un juego que cuenta una historia… El transcurso de la obra es un tanto lineal, aunque con la posibilidad de poder volver atrás en ciertos momentos y luchar contra viejos enemigos. Atención a cómo evolucionan los enemigos y combates, y también al particular uso del dinero y las psinergías que incluye el juego, pues solo Lucas y Kumatora podrán usar magia. La duración oscila alrededor de las 30 horas en 8 capítulos de duración muy variada, por ejemplo, el sexto apenas dura unos minutos mientras el séptimo lleva un mundo completar.

MOTHER 3 es un juego que gráficamente no desentona pero no entona. Esto tiene un significado, ya que se ha hecho esta entrega con el motor de la segunda (EarthBound). Con ello se quiere añadir nostalgia al juego respecto a su predecesor. De hecho, en cierta medida es un homenaje a este juego (ya sabréis porqué). El estilo consiste en detallar la figura de los personajes pero no su contenido, así como unificar el color en un tono y no crear claroscuros excesivos.  Con esto, se consigue un estilo muy variado y colorido. En las batallas lo más llamativo son los fondos de batalla, que se van moviendo creando efectos ilusorios al jugador, que no marean, pero sí hacen atractivos los combates. El apartado técnico es simple y resultón y basta para seguir la historia. La música del juego suena realmente bien, teniendo anotadas en el Test de Sonido nada menos de ¡250 melodías! En realidad algunas se repiten y otras son muy similares pero tienen algún cambio, o duran 5 segundos. En cualquier caso acompañan de maravilla al juego y no resultan repetitivas, al contrario, suena muy bien destacando la melodía amorosa del juego y la de los Puercaretos, las más potentes y las que simbolizan el conflicto natural-artificial que se plantea.

Un truco especial

MOTHER tiene unos cuantos secretos muy especiales y que mejor uno vaya descubriendo por su cuenta, pero de todos, el más práctico es la posibilidad de incluir un modo difícil al juego. La dificultad del juego está bien, aunque podía exigirle más. Si te gusta el desafío, prueba a poner de nombre en el santuario del pueblo “HARD MODE”, sin las comillas. No lo quites luego. Con este nombre activado, los enemigos tendrán el doble de PV, más velocidad y realizarán algunas habilidades muy peculiares. Que se preparen.


Conclusión
En pocas palabras, MOTHER 3 es una maravilla y destaca por su poderoso y emotivo argumento que seguro provocará una lagrimilla incluso al más ingenuo con el juego, y eso sin perder ni un ápice de gracia de su predecesor. Los combates son divertidos y amenos y en ningún caso frustrantes. La jugabilidad en su punto, un apartado técnico que cumple sobradamente, 30 horas de juego… y ya, porque luego no hay nada más que hacer, si acaso revivir la obra una y otra vez. Merece la pena y mucho disfrutar de una gran aventura como ésta sabiendo todos los detalles que la hacen única, y os contaría más de ella, pero hay algo llamado spoilers que uno no puede contar. Con eso solo puedo llamar a un esfuerzo colectivo para jugar, conocer y divulgar la enorme calidad de esta obra, quien sabe si Nintendo algún día le rinde un homenaje o algo (jajajaja). Si cualquiera, por lo que sea, quiere jugar a MOTHER 3, que lo haga a ciegas, sin saber exactamente que le espera más adelante. Además, que no busque nada del juego en YouTube, que inmediatamente le clavarán el final del juego y sus sorpresas. Simplemente, que se deje llevar por un juego que simplemente llega al corazón.


¡Hasta aquí el especial! Espero que os haya gustado. Solo me queda desear que este pepinillo siga dando guerra por mucho mas.